jueves, 13 de diciembre de 2007

Un día más, un día mágico


Suena el despertador. Una mañana más, una rutina a seguir. Con los ojos medio cerrados me dirijo al armario a coger la ropa de hoy intentando no caer al suelo, parece que mis piernas se despietan dos minutos mas tarde que el resto de mi cuerpo. Me meto en la ducha mientras escucho a Carlos Francino y su tropa. Luego oigo las noticias: atentado en el Líbano, otra muerte por violencia de género, la iglesia ha vuelto a decir otra de sus barbaridades... lo de siempre. Me entran ganas de sentarme en la ducha bajo el chorro de agua caliente y quedarme mirando a mis pequeños pies durante todo el día, pero la obligación me golpea dentro de mi cabeza como un tortazo en toda la cara. Me visto corriendo, ya son las 9:15 y me he propuesto llegar a la biblioteca a las 9:30. Bebo rapidamente un colacao y bajo a la calle. Dos grados bajo cero. Mucho frío. Entonces enciendo mi mp3. Suena Facto delafé y las flores azules y su canción "Fuerza". Esbozo una pequeña y tímida sonrisa. Hace frío, pero hay mucha luz. Subo el volumen de la canción para no oir el tráfico, para no oir más que las notas, los ritmos, las voces de la canción. Canto por dentro. Pienso en lo que tengo que estudiar hoy, y me digo a mi misma: "¡A por ello, Pepa!". Llego a la biblioteca. Apago mi mp3 y la realidad me absorbe sin tiempo siquiera a pedirla que me deje un rato más en mi burbuja musical. Me siento en la silla, los primeros minutos son de concentración, de aceptación del día al que me entrego como todos los demás, y me pongo a estudiar. Veo que avanzo, y me animo. La concetración se evapora y empiezo a imaginar el momento en el que me den mi última nota aprobada. ¿Lloraré? ¿Gritaré? Habré alcanzado un gran reto: licenciada en Psicologia, aunque luego me seguirá quedando mucho por delante. Vuelvo al mundo del estudio y sigo con el desarrollo cognitivo de la primera infancia....¡Las 14:00h! Me voy a casa. Por el camino, vuelvo a conectar mi mp3, y esta vez escucho a Flavio Rodriguez, "Quítate la ropa". Entonces me imagino a Ana cantando la primera parte de la canción y una pequeña risa se me escapa en medio de la calle. Pero también me acuerdo del lunes por la tarde, del sábado por la noche, de varios días a las 20:15h. Del Tacuba, de Asklepios, del Tío Molonio. De Magnatiz, de dlux, de Doble V, de Nach. De tabaco y menta. De cerveza y coca-cola. Del hi5. Del machu pichu. De "planetaviajero". Me acuerdo de tantas cosas. Un escalofrío me recorre el cuerpo. Llego a casa. Toca comer. Después, intento no caer en la tentación de la siesta, a pesar de que la cama me llama a gritos, pero yo la ingoro, soy mas fuerte que ella. Vuelvo a salir a la calle camino de la biblioteca, vuelvo a mi mp3, vuelvo a mi música, vuelvo a los recuerdos de antes, me gustan, me hacen sentir bien. Y vuelvo a estudiar. Hay menos concentración que por la mañana, me siento un poco adormilada. Pero no pasa nada.... Ya son las 20:00h! He quedado.... para acumular mas recuerdos sobre los que pensar mañana cuando conecte mi mp3 y escuche "Ninguna chavala tiene dueño (porque ella lo dijo)".

lunes, 12 de noviembre de 2007

Las cartas sobre la mesa, por favoooooor


Hoy he leido en cierta parte lo siguiente: "No porque no te amen como tu quieras, significa que no te amen con toda el alma y todas sus fuerzas" Cada dia ....... Gracias."....VENGA, HOMBRE!! Es la manera mas absurda de decir "estoy hasta los mismísimos de que no me quieras como yo quiero que lo hagas (vete tú a saber cómo), pero como estoy colado/a (no voy a desvelar el sexo de la persona de esta gran cita) hasta los huesos por ti, pues me pongo una "pequeña" excusa (la excusa sería "el/la pobre no tiene por qué quererme como yo quiera") y ale, todo solucionado. Que no, hombre, que no, que si alguien no te quiere como tu quieres, la cosa esta jodida, hay veces que hay que abrir los ojos, porque idealizamos el amor que sentimos por nuestra pareja y al final la idealizamos a ella, y todo se va al carajo, porque ya pueden hacernos lo que sea (hasta cierto punto) que siempre pensaremos "es que tiene su manera especial de querer, no le voy a cambiar ni exigirle que me quiera como yo quiero". Pues ahí esa persona tendría toda la razón, porque cada uno quiere al otro como le sale, pero los amores y los "quereres" tienen que complementarse, si no....chungo. Y yo lo se porque esa misma cita (un poco retocada) me la decía yo todos los dias durante bastante tiempo hace unos cuantos años por causa de la misma persona a quien va dirigida la cita. Complicado no? Pues es lo que hay, señores. Búsquense a alguien que les quiera como ustedes quieran que les quieran: si quieren romanticismos, búsquense un romántico, si quieren aventuras, a un aventurero, si quieren sexo, a un lujurioso, pero, por el amor de Dios, no sean masocas y se cuelguen por alguien que no les complementa, porque la cosa irá en picado, antes o después. Es sólo un consejo. Al final la gente (como debe ser) hace lo que le sale de........el corazón?

miércoles, 16 de mayo de 2007

MIEDO


La mente es la máquina más compleja jamás conocida por el ser humano, y a la vez, la más hermosa y temida. Gracias a la mente (entendida ésta como actividad del cerebro) entendemos las cosas que ocurren a nuestro alrededor dentro del contexto del en el que hemos nacido. Pero: ¿qué pasa cuando tu mente no responde a la lógica, a la percepción de lo cognitivo, a lo "normal"? ¿Qué ocurre cuando un día te despiertas, y sin saber por qué ni cómo, cuando las cosas te van bien y, en teoría, eres feliz, las lágrimas te brotan y tu mente no "funciona" como el resto de los días? De repente, tienes miedo a la soledad, a tus pensamientos mas temidos que te torturtan, a la obscuridad de tu ser, a la existencia, al sufrimiento... Caes en un pozo en el que sientes que no tiene salida, un laberinto que no sabes muy bien cómo has entrado y menos por dónde salir. Allá donde vayas, tus cogniciones mas espeluznantes te acompañan, sólo quieres dormir, porque durmiendo no piensas, la mente descansa. No encuentras explicaciones rezonables, tu vida se reduce a darle vueltas a cosas que hasta te da miedo mostrar a los demás por el qué van a pensar de ti. Te sientes sólo en la inmensidad del océano psicológico de tu "yo" que te fustiga sin piedad. No hay control, has perdido las riendas de tus pensamientos.
En una palabra, tienes MIEDO.

domingo, 11 de marzo de 2007

CAPITULO 1: "PAULA" (I)

Paula se siente orgullosa. O al menos eso parece. Se levanta bastante pronto, a las 7:15 de la mañana aproximadamente, porque tiene clase a las 8. Es de los pocos esfuerzos que hace a lo largo del día. La verdad es que ir a la facultad le resulta un absoluto aburrimiento, pero así puede lucir sus doscientos trapos que llaman aún más la atención con el taconeo de sus zapatos que retumba junto a su excesivo alto tono de voz por los (me atrevería a decir) siniestros pasillos de la facultad. Todo el mundo la mira, y ella se siente un poco más feliz con cada mirada encima de su cuerpo. Se siente poderosa, invencible, "superior".... ella sabe que es "superior", o al menos lo intenta creer. ¿Cómo no va a serlo? Tiene un hermano que hace las delicias de media Galicia, una madre con un perro exacto al de Paris Hilton colgado al cuello las 24 horas del día (qué maravillosa es la madre de Paula), y su papá gana un montón de pasta. Estaba claro que su destino era el de ser una persona "superior". Además, no cualquiera se atrevería a estudiar medicina. Hay que ver un montón de cosas desagradables en la profesión y no caerse redondo. Pero a ella no le interesa eso de salvar vidas, ella quiere ser cirujano plástico... ¿te imaginas? Podría operar a gente famosa y ganar un montón de dinero, casi como papá... la verdad es que ella misma reconoce cuando lo piensa que suena un poco superficial la razón de su vocación, pero... ¿qué mas da? Si la preguntan por qué quiere ser cirujano plástico, ya se inventará alguna otra razón que suene menos frívola. Al fin y al cabo, el mundo está construído de apariencias, y ella se encarga mucho de cuidar la suya. La gente no puede ir por ahí pensando que es una más, porque no es así. Y de ello se encarga: ha conseguido convencer a sus amigas de la residencia para alquilar un piso entre las cuatro de 250 metros cuadrados... cuesta bastante dinero al mes, pero papá se lo paga, ella se lo merece. La única bronca con quien tuvo por el piso fue con Mónica, pero sabe que la tiene dominada. Mónica es débil, y se deja manejar bastante bien. A veces se siente mal por cosas que le hace, pero... ¿qué mas da? Ya se le pasará. Como el día ese en que Paula entró en la cocina en bragas y Mónica se puso a gritarla poque estaba delante su novio. La llamó "maleducada". Y luego Mónica se las da de "progre", seguro... menuda progre de medio pelo.